Ser sabio no es repetir frases bonitas todo el tiempo, sino vivirlas día a día.

Existe un proverbio que dice: «El que es sabio mide sus palabras». Una palabra calmada en un momento de tensión puede apagar un fuego.

Muchas veces decimos lo primero que nos viene a la mente y terminamos en un problema, avergonzados o ambos.

A veces es difícil pensar antes de hablar, pero vale la pena hacerlo. Dios nos invita a hablar con prudencia, no por impulso. Mide tus palabras hoy, siembra paz. La recompensa será maravillosa.

«El que es prudente controla su lengua.» (Proverbios 17:27)


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

0
Empty Cart Your Cart is Empty!

Parece que todavía no has agregado ningún artículo a tu carrito.

Buscar productos
Desarrollado por Caddy